Carta abierta

Carta abierta

A UNICEF Y ASOCIACIONES PROTECTORAS DE LA INFANCIA

Recientemente les dirigí una carta abierta sobre los abusos institucionalizados por el Estado cubano contra los niños cubanos a quienes adoctrina políticamente, separa de sus familias por diversos expedientes, emplea en labores agrícolas y manipula en actos políticos y de hostigamiento a los disidentes políticos.

Ahora me dirijo a Uds. por abusos cometidos directamente contra mi hija en inescrupuloso intento de perjudicarme por mi labor de periodista independiente

Les ruego hagan oír su voz en todos los sitios posibles y se dirijan a las autoridades cubanas para que cesen en esos abusos contra los hijos de disidentes.

Adjunto la carta que dirijo al respecto al Fiscal general de la República de Cuba:

La Habana, l4 de noviembre del 2006.

Dr. Juan Escalona Regueira
Fiscal General de la República de Cuba.

Conoce UD. de sobra del pisoteo de las leyes vigentes y de la falta de freno moral que caracteriza el actuar de la policía, particularmente cuando se siente impune en la represión de los disidentes políticos.

Allanamientos de morada en las horas prohibidas por la ley, detenciones arbitrarias por policías que ocultan su identidad ocurren casi a diario con el pretexto de la defensa de la “revolución”.

Esos casos son comunicados con frecuencia a esa Fiscalía por cartas y denuncias, son hechos públicos por la prensa independiente.

Y desde su edificio de la fiscalía basta caminar unas cuadras para sentir que la ciudad parece un país ocupado por el extranjero, debido a la conducta de los policías.

Pero me deja atónito como el colmo de la bajeza el que mi hija de trece años sea interrogada y manipulada desde los ll años de edad por personas que se le identifican como agentes de la contrainteligencia que la “atienden”.

Uno de ellos, el agente de la Seguridad del Estado que reprime a la prensa independiente y dice llamarse “Moisés”.

No necesita UD. explicación sobre lo ilegal e inmoral de esta crueldad con una menor de edad, los traumas que puede ocasionarle el que oficiales la confundan deformando la imagen paterna a sus ojos, la interroguen y horroricen por el “delito” de ser hija de periodista independiente


Los daños a mi hija son responsabilidad de estos individuos inescrupulosos y de las autoridades del Estado que los sostienen en la impunidad y que en lugar de encarcelarme o agredirme o matarme abusan así de una menor.

Los sicarios de los dictadores Gerardo Machado o de Batista me habrían matado, pero la mayoría de ellos se habría negado como a bajeza indigna de su hombría a dañar psicológicamente a una niña. Eso queda para los “revolucionarios”.

Hace un tiempo también el tal “Moisés” citó con citación falsa a mi anciano padre para amenazarlo y utilizarlo.

¿Qué es lo próximo? ¿Chantajearme con mi hija para que deje mi labor de periodista independiente? ¿Inducirla a algún delito o inmoralidad para captarla para espiar a su propio padre?¿Presentarla en uno de esos actos en que se abusa de la infancia para que pronuncie discursos políticos y condene a los “mercenarios del imperialismo”

UD. Está en el deber – particularmente si acaso cree en la justicia de lo que llaman “revolución” y emplea estos métodos-, de procesar por estos delitos a estos agentes con carnet de la Contrainteligencia y la Seguridad del Estado
Y de proteger a mi hija de quienes la dañan. Y a cualquier otro niño en situación similar .Le exijo que cumpla ese deber – a menos que carezca de autoridad contra estos “Moisés” o apruebe sus métodos y se haga protector silente de estos , casos ambos en los que su deber seria renunciar a su cargo –

Pueden hacerles lo mismo a los hijos de cualquier ciudadano, incluido UD.



Jaime Leygonier Fernández.

Carnet de identidad 54 03l800489

Con copia a UNICEF y a asociaciones protectoras de la infancia