Por Yusnaimy Jorge Soca, activista de Derechos Humanos.
La Habana, Cuba. 27 de septiembre de 2009.
El Dr. Darsi Ferrer no sólo sufre el injusto encierro al que es sometido por sus ideas políticas y su sueño de libertad para los cubanos, como castigo adicional las autoridades del régimen también le niegan el derecho a recibir tratamiento médico para sus dolencias de salud.
Darsi presenta sepsis bucal unida a trastornos metabólicos que le interfieren la absorción del calcio, por lo que necesita someterse a una cirugía odontológica extensa, para la extracción de las piezas dentales que aún conserva y que le realicen implante de toda la dentadura. Esa situación estomatológica le provoca serias limitaciones para alimentarse y el sufrimiento de frecuentes dolores de muelas, que hacen su confinamiento más insoportable.
El jefe de la prisión, teniente coronel Julio Perera Ferrer, alega que entre los servicios de salud que ofrece la cárcel Valle Grande, donde Darsi está recluido, no dispone de especialistas ni recursos para asumir la atención médica que él requiere, y desde el pasado 7 de septiembre prometió coordinar alguna solución con el llamado alto mando de la seguridad del estado.
Darsi es un ser humano y tiene derecho a que se le atienda su salud. Antes de ser encarcelado estaba ultimando las gestiones para irse a España, por visa humanitaria, para recibir tratamiento con su amigo español Luis, quien es odontólogo de prestigio y tiene una clínica estomatológica privada, y por cuestión de solidaridad y asumiendo todo el costo del viaje, el tratamiento y la estancia, está dispuesto a brindarle la asistencia médica.
Según la propaganda oficial Cuba es una potencia médica, lo que hace difícil creer que no hayan clínicas donde se realicen extracciones e implantes de la dentadura. Además, en caso de no existir esos servicios es conocido que muchos de los funcionarios de la cúpula del poder, empezando por el Sr. Fidel Castro, sufragan con el dinero del pueblo los servicios de salud que reciben en el país de médicos extranjeros, o los tratamientos a los que se someten en el exterior.
Ninguno de esos personajes tiene por opción ante un problema de salud aguantar dolores como si fueran animales y escuchar justificaciones para no ser atendidos médicamente.Darsi asegura que hará lo posible por soportar el sufrimiento y esperará un tiempo prudencial para que le den una solución adecuada a su dolencia de salud, lo que no aceptará bajo ninguna condición es que su derecho a la asistencia médica sea ignorado intencionalmente, pues él está convencido de que es menos traumático que le den un tiro, que aguantar dolores por tiempo indefinido.
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