Friday, July 12, 2013

Normalización entre gobiernos a espaldas del pueblo cubano

Por Darsi Ferret
Resulta más que obvia la jugada simplona del castrismo. La sobrevivencia del régimen a toda costa es lo único que les interesa. No responden a ideologías, sino a la lógica de no soltar el control del poder. De ahí que ocurran situaciones como la de estos días, donde se escucha al cónsul cubano en Miami invitando a los exiliados a invertir en Cuba, y sugiriéndoles que compren casas y disfruten de sus jubilaciones en la isla, por supuesto, llevando la chequera del Medicare.
Para la Casa Blanca el propósito es diferente y también muy claro. Su prioridad es la estabilidad en Cuba, por encima de la libertad del pueblo cubano. Pensar otra cosa es dejarse engañar inocentemente.
La muerte de Chávez ha dejado a los Castro muy mal parados. Se sustentan del subsidio multimillonario que reciben de Venezuela, pues las remesas representan una entrada de dólares importante pero no es la principal. El nuevo gobernante del chavismo, Nicolás Maduro, no ofrece garantías y la tiene difícil al frente del poder. Su falta de liderazgo e ilegitimidad conllevan a que pueda terminar siendo derrocado. No obstante, aunque no sea así, la economía venezolana está en franco colapso y con tendencia a empeorar, por lo que de una u otra manera la carga de Cuba tendrá que ser desengachada, pues el dinero ya no da para sostener ambos regímenes.
Todo ese rejuego de intereses y propósitos, que no repara en los anhelos de libertad y democracia de los cubanos, propicia que se estén dando negociaciones por debajo de la colcha entre el castrismo y el gobierno de EEUU.
Las medidas de los Castro, que permiten mayores facilidades de viajes a los cubanos de ambas orillas, deja sin sentido la Ley de Ajuste Cubano, sin embargo, no será eliminada, pues es un modo de quitarle presión a la dictadura en momentos donde se tambalea. Sin Venezuela, al régimen solo le queda la opción de ser apuntalado de trasmano por los EEUU. Y es que los Castro se están moviendo con la ficha del chantaje a los norteamericanos.
Una Cuba inestable obligaría a los EEUU a intervenir militarmente en la isla, algo que los aterra por el costo politico que les traería. Y es que el descontrol ante un colapso de la dictadura desataría un éxodo masivo desestabilizador de la Florida, en momentos donde se libra una guerra contra el terrorismo. También la inestabilidad en la isla llevaría a la posibilidad de que Cuba sea utilizada como refugio y base operativa del narcotráfico y del terrorismo internacional. O sea, el litoral que comparten Cuba y EEUU se volvería más incontrolable y complejo que la propia frontera de EEUU con México. A los EEUU se le pone la piel de gallina tan solo de pensar en esa situación. No se oponen a un cambio de régimen pero lo desean gradual y ordenado, bajo negociaciones.
Toda esta pelicula demuestra que hasta ahora el pueblo de la isla no es considerado parte protagónica de los acontecimientos que están teniendo lugar. Es hora de que los cubanos de a pie se construyan el futuro con sus propias manos o quedarán excluidos a merced de la voluntad e intereses de terceros.


");

No comments:

Post a Comment