El aislamiento, la peor de las estrategias frente al terro...

Por Darsi Ferrer:

Y llegó lo temido, y hasta esperado dadas las circunstancias. En lo que resulta uno de los maratones más importante de los EEUU y del mundo, cargado de simbolismo por tratarse de una especie de fiesta que abre la primavera en Boston, los terroristas, enemigos acérrimos de los valores occidentales y del respeto por la vida de los seres humanos, en medio de la multitud sembraron luto, dolor, alarma,inseguridad, desesperación y terror. Hasta ahora son tres las víctimas fatales, entre ellos un inocente de 8 años, y más de 130 heridos, de los cuales varios se reportan en estado crítico, y algunos han tenido que sufrir amputaciones de miembros. Ya se sabe que fueron dos las bombas que, calculada y fríamente, hicieron estallar y que las autoridades encontraron otros dos artefactos explosivos, los que fueron desmantelados de modo controlado. ¿Qué lección deja este abominable acto terrorista en pleno corazón de los EEUU? Demuestra de modo dramático que el aislarse como concha y desentenderse de las responsabilidades internacionales no le garantiza a la nación norteamericana, ni a ningún otro país, el no ser víctimas de quienes aspiran y viven dedicados al propósito de causar el mayor daño posible a la humanidad. El león nunca puede actuar como liebre, aunque sea bueno y comprensivo, pues corre el riesgo de enviar el mensaje equivocado y ser asumido como débíl. Guste o no, a los EEUU, por su condición de potencia mundial, le corresponde el rol de liderar la lucha a brazo partido en defensa de la libertad, la paz y la estabilidad global donde quiera que sean amenazadas. El presidente reelegido, Barack Obama, le ha dado un giro a la política exterior de los EEUU para nada recommendable ni conveniente. Durante su primera disputa electoral por la Casa Blanca una de sus principales promesas fue cerrar la prisión de la Base Naval de Guantánamo, algo que en nada resuelve ni refuerza la seguridad nacional de EEUU, ni contribuye a combatir el lastre del terrorismo internacional. También se enfocó en poner fecha a la salida de las tropas norteamericanas del territorio de Irak y Afganistán, aún sin conseguir derrotar definitvamente los grupos terroristas que operan en esas zonas. Durante su mandato ha enfriado al máximo la sólida relación existente con el aliado natural del Medio Oriente, Israel, única democracia en el convulso y hostil territorio de árabes, persas y judíos. Ante la ola liberadora protagonizada por los pueblos de Túnez, Egipto, Libia, Yemen y demás naciones árabes, su postura fue vacilante, y más pasiva que la posición de paises con menos peso politico y militar como Inglaterra y Francia. El caso de la guerra civil generada en Siria resulta bochornoso cuando se analiza la falta de reacción de la administración de Obama, que ante el genocidio cometido por Bashar al Assad y su séquitos se ha dejado imponer las condiciones de complicidad de Rusia y China con dicho régimen, ignorando y dejando en total abandono a ese masacrado pueblo. Tampoco se le ve responder a las peligrosas e inaceptables provocaciones y amenazas del regimen norcoreano de Kim Jong-Un. Este loco gobernante asiático de manera intolerable ha lanzado misiles, realizado pruebas nucleares y declarado en repetidas ocasiones que atacará con sus misiles atómicos a los EEUU y a su vecino Corea del Sur. De la misma manera no hubo respuesta a los ataques cibernéticos de instituciones y empresas norteamericanas protagonizados por el ejército chino. Los Ayatolas y Mahmud Ahmadineyad siguen en Irán con el desarrollo de su programa nuclear y sus amenazas a EEUU e Israel, sin ser molestados ni confrontados con la firmeza que se require. En nuestra región, Hugo Chávez primero y ahora Maduro, han violado flagrantemente el Estado de Derecho en Venezuela y no se les aplica ninguna medida enérgica que los obligue a retornar al respeto a los principios y valores occidentales. Hace algunos meses, los terroristas atacaron y mataron impunemente en Bengasi al embajador norteamericano y a varios funcionarios y soldados de la embajada… Queda esperar si la imagen internacional de EEUU se sigue deteriorando y, por consiguiente, terminan por perderle el disminuido respeto que le tienen y se convierte en blanco de otros golpes mortíferos asestados por sus sedientos y envalentonados enemigos, o si por fin el gobierno actual asume su papel y se decide a combatir a los terroristas con la fuerza y la determinación que exige el peligro que estos representan. El bienestar de la Humanidad depende de un EEUU vigilante y comprometido con la libertad, la democracia y el respeto a las libertades individuales y los derechos humanos. Ojalá esta lamentable tragedia sirva para que Obama lo entienda.