No me puedo resignar
a haber perdido mi patria,
se que pronto arribará
la libertad a sus playas.
Se romperán las cadenas
que la tienen amarrada,
terminará su martirio,
se establecerá la calma.
Libre muy pronto ondeará
nuestra bandera en su asta,
cantarán nuestras palmeras,
danzarán las dulces cañas.
Surgirá el amor de nuevo,
risas reemplazarán lágrimas,
sanarán muchas heridas,
cicatrizarán las llagas.
Jugarán libres los niños
disfrutando de su infancia,
la infancia que interrumpiera
una doctrina malvada.
Nos uniremos de nuevo
en un fraternal abrazo,
los que no estamos manchados,
los que de verdad la amamos.
Los malvados pagarán
el precio de sus pecados,
la justicia se impondrá,
con el castigo adecuado.
Tendremos paz y progreso
cuando se calmen las aguas,
y esperando ese momento
¡Sigo yo sin resignarme
a haber perdido mi patria!
Cástulo Gregorisch
12/16/03
Ziva at Blog for Cuba has another wonderful poem by the same author.
No comments:
Post a Comment